¿Te has preguntado cómo es que procesamos la comida? ¡El aparato digestivo es el encargado!
El aparato digestivo es el encargado de llevar a cabo una de las funciones principales de nuestro cuerpo, el proceso de la digestión. Esta función es la que permite que el cuerpo obtenga de los alimentos los diversos nutrientes que luego serán absorbidos.
El proceso digestivo tiene la capacidad de descomponer los alimentos en partes pequeñas hasta llegar a los nutrientes para que nuestro organismo pueda absorberlos de forma eficiente y hacer uso de ellos, aportando a su correcto funcionamiento, así como brindarnos energía, contribuir al crecimiento y a la reparación celular.
¿Qué partes del cuerpo forman parte del aparato digestivo?
El aparato digestivo se encuentra compuesto principalmente por:
- Boca: es donde se realiza la masticación.
- Esófago: estructura de forma tubular que une a la boca con el estómago y contribuye impulsar el paso de la comida.
- Estómago: este órgano se ocupa de digerir los alimentos. En el proceso de la digestión participan enzimas y el ácido gástrico.
- Hígado: órgano encargado de producir bilis, que contribuye a la digestión de las grasas.
- Vesícula biliar: se caracteriza por tener forma de saco, es la encargada de almacenar la bilis producida por el hígado y liberarla según sea necesario.
- Páncreas: glándula responsable de producir insulina, hormona de relevancia en el metabolismo de los azúcares.
- Intestino delgado: en este órgano se termina de digerir los alimentos y se absorben los nutrientes. El intestino delgado está compuesto de tres partes, el duodeno, yeyuno e íleon.
- Intestino grueso: lleno de miles de bacterias, en esta porción del aparato digestivo se absorbe agua y se forman las heces a través de las cuales se eliminan sustancias de desecho.
- Ano: zona por la cual se expulsan las heces.
Cada parte del aparato digestivo necesita trabajar adecuadamente para poder brindarle a nuestro organismo los nutrientes que necesita.
¿Cómo funciona el aparato digestivo?
- En la boca los alimentos son triturados en partes más pequeñas y junto con ayuda de la saliva se conforma el bolo alimenticio. Este bolo, por medio de la lengua, es empujado hacia la garganta para llegar al esófago.
- Una vez que llega al final del esófago, el bolo alimenticio pasa a través del esfínter esofágico hacia el estómago.
- Cuando ingresa al estómago, el bolo se mezcla con los jugos digestivos que contienen enzimas, las cuales comienzan a digerir los alimentos, que luego pasan al intestino delgado.
- En el intestino delgado se continúa con el proceso de digestión a la vez que se absorben los nutrientes obtenidos.
- Continuando, aquellas partes no digeribles de los alimentos pasan al intestino grueso.
- El intestino grueso finalmente absorbe agua y convierte los desechos en heces que continúan avanzando por el mismo hasta su evacuación.
Cumpliendo de esta manera con su función principal, la digestión, proporcionando a nuestro cuerpo los nutrientes y energía que este requiere.
¿Qué alimentos apoyan en el cuidado del aparato digestivo?
Siendo el normal funcionamiento del aparato digestivo vital para nuestra salud, aquí te compartimos algunos alimentos que contribuyen a mantenerlo saludable:
- Yogur: alimento lácteo fermentado que puede contener probióticos, bacterias que son buenas para la salud intestinal.
- Manzana: gracias a su contenido en fibra soluble, contribuye a prevenir el estreñimiento.
- Semillas de Chía: fuente de fibra, que contribuyendo al bienestar intestinal.
- Papaya: fruta que contiene papaína, una enzima que puede descomponer las fibras proteicas. También está relacionada con proporcionar beneficios en casos de estreñimiento aportando a la salud digestiva.
- Granos Integrales: los cereales enteros son ricos en fibra, algunos ejemplos son el salvado de trigo, la avena, la quinua y productos hechos de los mismos. La fibra insoluble contribuye a aumentar el volumen de las heces, por lo que puede ayudar a reducir el estreñimiento.
- Betarraga: aporta beneficios al aparato digestivo por su contenido en fibra.
- Frutos secos: son una gran fuente de fibra insoluble, la cual puede apoyar a la salud intestinal.
- Verduras de color verde oscuro: fuente de fibra insoluble, que puede ayudar a aliviar el estreñimiento, promoviendo la salud del aparato digestivo. Entre ellas encontramos las espinacas, el brócoli, la col rizada, entre otras.
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